Actualizado el: 5 enero 2024
Si has oído hablar del seguro de caución, pero no tienes demasiado claro en qué consiste, no te preocupes. A continuación, te ofrecemos toda la información que necesitas conocer al respecto.
Definición del seguro de caución
Comenzamos comentándote que la caución es una garantía entregada, que confirma el cumplimiento de una obligación contractual o legal. Es decir, si vas a firmar un acuerdo o un contrato, puedes asegurarte de que la otra parte va a cumplir con las condiciones que pactes en el documento correspondiente.
Si no es así, como beneficiario/a obtendrás una indemnización por los daños que pudiera provocar el incumplimiento por parte del tomador (la otra parte). Para poder firmar el seguro, es necesario que acuerdes una cifra y unas condiciones concretas, tanto con el firmante como con la aseguradora.
Lo habitual es que en la cobertura se especifique cuáles son las obligaciones a cumplir del contrato. No se incluyen el compromiso de pago de un préstamo o similar.
¿Cuál es la ley que rige este tipo de seguro de caución?
La ley 50/1980 del 8 de octubre, en su sección sexta y artículo 68, especifica lo siguiente: El asegurador se obliga, si el tomador no cumple con sus obligaciones, a indemnizar al asegurado por los daños patrimoniales sufridos. Se especifica que los mismos han de estar limitados por el contrato o por la ley. Los pagos realizados por el asegurador se le reclamarán al tomador.
Es decir, la aseguradora te paga la indemnización que especifiques en el contrato y le pide el dinero correspondiente a la otra parte.
Requisitos para la contratación de un seguro de caución
Son diversos y has de tenerlos en cuenta antes de solicitar este tipo de seguro. Toma nota:
- Debes ser mayor de edad y tener un máximo de 70 años.
- Has de tener una antigüedad mínima de un año.
- El equilibrio entre alquiler e ingreso, en relación a la cantidad a pagar, solo puede ser de un 35 % de los ingresos netos o un 30 % de los brutos.
Pueden solicitarlos los empleados dependientes, los autónomos y los pensionistas.
¿Para qué sirve un seguro de caución?
Si se usa tanto por parte de las empresas es, precisamente, por su indudable utilidad. Te describimos mejor las garantías que ofrece en los siguientes apartados.
De licitación u oferta
De presentarte a una subasta o concurso, el seguro certifica que vas a abonar la cantidad correspondiente. Ello confirma que vas en serio y que te comprometes a pagar. Lo habitual es que la póliza cubra un porcentaje del precio que se abonará finalmente.
De ejecución
Es sinónimo de seguridad financiera. Puedes firmar cualquier acuerdo, con todo tipo de condiciones legales, porque sabes que tu aseguradora se encargará de afrontar la indemnización.
De anticipo
Si te dedicas al sector de la construcción, el contratista siempre recibe un anticipo. El seguro sirve para obligarle a que el dinero recibido como anticipo lo dedique exclusivamente a la obra encargada.
De mantenimiento o calidad
El primero se usa en contratos de gestión, suministro u obra. Hace referencia al mantenimiento necesario que ha de llevarse a cabo para que los resultados del trabajo sean más duraderos.
En algunas ocasiones, firmarás un contrato a cambio de un encargo de productos. Lo habitual es que se dé un plazo de tiempo de cortesía para corregir posibles defectos de fabricación. De no subsanarse, perderás dinero y es entonces cuando puedes acogerte al seguro que se viene describiendo.
Judicial
De aplazamiento del pago de impuestos
El empresario demandante se garantiza que el coste de las obligaciones procesales estará cubierto. Nos referimos a la gestión de los créditos impagados o los daños que se deriven del incumplimiento de los acuerdos especificados en el contrato.
Es la garantía más usada por autónomos y pymes. El objetivo es aplazar el pago a la Agencia Tributaria de impuestos como el IRPF o el IVA entre otros.
Ejemplos prácticos de un seguro de caución con garantías judiciales
Es posible que todo lo anterior te haya quedado claro, pero quizá necesites saber para qué se usa, exactamente, este seguro. Te lo contamos en el siguiente listado:
- Sanciones recibidas o solicitadas por competencia desleal.
- Una sentencia judicial por el despido de un trabajador.
- Sanciones de la Agencia Tributaria.
- Sentencias condenatorias tras un litigio con un cliente o proveedor.
- Garantía en un juzgado para proceder a una ejecución provisional.
- La presentación de recursos de alzada, de tipo contencioso-administrativo o de reposición.
- Actas por disconformidad en el abono de los impuestos.
- Recursos ante la Hacienda municipal o pública, tras haber apelado una liquidación con la que no estás conforme.
- Recursos de los tribunales que se incluyan en la modalidad del contencioso-administrativo.
Debes tener en cuenta que se aplican cuando un juez solicite una garantía relacionada con el derecho privado. De solicitar el magistrado una medida cautelar, es posible acogerse a:
- La contracautela. Es la garantía que puede exigir quien la solicite. El objetivo es asegurarse el pago de los daños y perjuicios si la solicitud no se ajusta a la ley.
- El cambio de las medidas cautelares. Es posible sustituir la sufrida por el demandado y liberar el patrimonio que quedara afectado por esta circunstancia.
Otros tipos de póliza del seguro de caución
Debemos comenzar indicando que el seguro se usa también para certificar que una de las partes implicadas en un litigio afrontará las obligaciones especificadas en su resolución. Las pólizas de fianza incluyen tipos como:
- A favor de la Administración.
- Personal privada.
- Para un depositario de bienes o mercancías.
Obligaciones legales
Recuerda que todo dependerá de tu nicho de mercado. La ley especifica los siguientes aspectos del seguro de caución:
- Se usa como un sistema para agilizar los trámites en la aduana. Muchos servicios aduaneros solicitan una garantía previa de pago de la deuda con la Agencia Tributaria, que genera una mercancía importada. También se aplica a las mercancías de exportación que no salen del país.
- La conexión a la red eléctrica durante la creación de una planta de energía sostenible. La Administración exige el seguro antes de conceder el acceso.
- La contratación de publicidad. El tomador del seguro tiene que cumplir con las responsabilidades estipuladas en el contrato correspondiente. Se le puede solicitar una indemnización en caso de incumplir los plazos de entrega de acciones relacionadas con la publicidad o la comunicación.
- El Fondo Español de Garantía Agraria. Se cubren las responsabilidades del tomador en todo lo relativo a la disposición de los recursos incluidos en el antedicho fondo.
Ventajas del seguro de caución
A la hora de contratar una póliza de caución quizá tengas dudas sobre si merece la pena abonarla. Los siguientes beneficios son la mejor respuesta a tu pregunta:
- La póliza del seguro no se considera un riesgo por parte de la Central de Información de Riesgos del Banco de España (CIRBE). Es decir, el perfil crediticio de tu negocio sigue intacto y te permite pedir un crédito a la entidad que quieras.
- Su precio es muy asequible. Como empresa o autónomo no abonarás gastos de apertura.
- Las aseguradoras presentan una amplia oferta, lo que te permite elegir la que mejor encaje con tus necesidades.
- Potencia el tráfico mercantil. Mejora la solvencia ya que agiliza procesos como el de contratación. Contratando un seguro de este tipo ganas en competitividad.
¿Cómo se confirma la titularidad del seguro de caución?
Como tomador, debes solicitar el certificado a tu aseguradora donde se incluye cuál es la obligación garantizada, la modalidad, el precio y el techo especificado. Para comenzar a disfrutar de las garantías necesitas:
- Tener la póliza con todos los datos, sellada y firmada por la aseguradora.
- En las condiciones de la póliza debe constar el tipo de caución contratado.
Posteriormente, la compañía emite el certificado para el beneficiario, procediendo al pago de la prima reclamada. El certificado del seguro puede cancelarse si la aseguradora lo desea. Lo habitual es que:
- Se lleve a cabo la devolución del documento al asegurador.
- Este último reciba el resguardo de los depósitos realizados.
- De no encontrarse los documentos originales, bastaría con la póliza original del beneficiario.
Situaciones en las que te será de gran ayuda el seguro de caución
Una vez más, debes tener en cuenta el sector al que te dedicas, pero su utilidad es indudable en los siguientes supuestos:
- El impago de un alquiler.
- El pago de los gastos de un proceso judicial.
- La ocupación de una de tus propiedades.
- El pago de impuestos y de suministros básicos como el agua, la luz y el gas.
- La protección como propietario frente a los gastos que genera y no paga el inquilino de tu local comercial o nave industrial correspondiente.
Esperamos haberte dado todas las claves sobre el seguro de caución. Repasa sus características y ventajas para decidir si es el que mejor se ajusta a tus necesidades. Busca entre las opciones disponibles para obtener una oferta a tu medida.
Convierte esta alternativa en la más adecuada para aprovechar todas las garantías ya comentadas. Por su utilidad y garantías, es una opción ideal e imprescindible para autónomos y empresarios de diversa índole.
