¿Conoces el preaviso de excedencia voluntaria? Repasamos todas sus claves para que descubras sus características y sus plazos legales entre otras cuestiones, tema importante para tu empresa.
¿Qué es el preaviso de excedencia voluntaria?
Según indica el artículo 46 del Estatuto de los Trabajadores, aquella que le solicitas como empleado/a a tu empresa.
La ley te asiste y lo que le pides a tu empleador es que respete la relación laboral que os une, aunque vayas a dejar de trabajar durante un tiempo.
¿Cuánto tiempo de preaviso se necesita para pedir una excedencia voluntaria?
Respecto a la excedencia voluntaria y plazo de preaviso todo dependerá del convenio colectivo de tu profesión.
Si no se estipulase ninguna cifra, lo habitual es que se trate de entre 15 y 30 días. De hecho, la empresa debe responderte en un plazo prudencial qué piensa de tu solicitud.
Si te la deniega debe explicarte cuál es el motivo. No olvides que la excedencia es un derecho y que si se niega puedes tomar medidas legales.
¿Cuáles son los requisitos para solicitar la excedencia voluntaria?
El único es que lleves trabajando un año en la empresa independientemente del tipo de contrato que firmases.
El tiempo de preaviso de la excedencia voluntaria dependerá del margen que le quieras dar a la empresa para encontrar a otro profesional para tu puesto.
¿Cuánto tiempo puedes disfrutar de la excedencia?
El Estatuto de los Trabajadores indica que no debe ser inferior a cuatro meses y no ha de superar los cinco años.
Dependiendo del convenio que te afecte, este último plazo se podría ampliar. Es importante subrayar que se trata de una excedencia que no se puede fraccionar en distintos plazos.
¿Existe un modelo de preaviso de excedencia voluntaria?
No, ya que basta con entregar un documento en la empresa con tus datos personales, los motivos que te llevan a pedir la excedencia, la fecha de inicio y la fecha de finalización.
¿Cuáles son tus obligaciones como trabajador?
La principal es que durante tu excedencia sigas manteniendo la buena fe. Es decir, que no trabajes para otra empresa.
En este caso, se podría deducir que has utilizado tu experiencia y tu formación en tu empresa para enriquecer a otra, lo que justificaría tu despido y sin ningún tipo de indemnización.
Sin embargo, sí podrías trabajar en un ámbito totalmente distinto al habitual. Cuando vaya a terminar tu excedencia has de solicitar el reingreso para que tus derechos se sigan respetando.
Estrategias empresariales para gestionar el preaviso de excedencia voluntaria
Cuando una persona que trabaja para tu negocio te solicita una excedencia has de aceptarla por escrito y de forma clara.
El objetivo es evitar que el/la empleado/a se considere en excedencia sin haberlo acordado contigo previamente. Ahora bien, a la hora de la readmisión tienes que:
- Respetar todas las condiciones contractuales y de salario de la persona, pero solo si existe el mismo puesto que desempeñaba o uno similar.
- Recordar que la excedencia no garantiza el regreso al puesto que se abandonó, sino un derecho preferente de reingreso en cuanto haya una vacante.
Como empresario/a tienes derecho a contratar a una persona para cubrir el puesto correspondiente incluso días antes de que comience la excedencia para llevar a cabo un periodo de formación o adaptación. Otra alternativa es no contratar a nadie y repartir las tareas disponibles.
Al mismo tiempo, el periodo de excedencia no conlleva ni el abono del sueldo, ni computa para la antigüedad del empleado a la hora de despedirlo.
Lo más importante es que recuerdes que el trabajador en excedencia sí tiene derecho a reclamar el puesto que tenía o uno similar.
Si hubiera uno disponible debes llamarle obligatoriamente, ya que en caso contrario te podría demandar por daños y perjuicios exigiéndote el sueldo que habría ganado desde que se generó la vacante hasta la fecha. Asimismo, te solicitará la readmisión.
El regreso de la excedencia también conlleva que se respete su horario, su salario y la localización de su centro de trabajo.
En caso contrario, es conveniente que programes una reunión para comentar los nuevos detalles de su puesto si los hubiera.
A todo lo anterior le debes añadir un tercer supuesto: que no quieras readmitir a la persona. Ello conllevaría una demanda por despido improcedente ante un juzgado de lo social.
La ley estará siempre de parte del empleado, por lo que has de tenerlo muy en cuenta a la hora de elegir esta alternativa.
Conclusión
Esperamos haberte aclarado todas tus dudas sobre el preaviso de la excedencia voluntaria. Finalizamos recordándote que tanto el trabajador como el empresario han de colaborar para que la situación se solucione de forma satisfactoria.
Siempre recomendamos ponerse en el papel de la otra parte para entender mejor cómo afrontar una situación que no debería convertirse en un problema para ninguno de los implicados.
